Si damos crédito a la información originada en la empresa que gestiona el servicio de agua potable de Manta, Epam, muchísimos habitantes de la ciudad ignoran que una parte de los desechos sólidos que arrojan a las calles taponan las rejillas del drenaje de aguas lluvias y la otra parte tapona las alcantarillas sanitarias. O, lo que es peor, desconocen que el inodoro no es el recipiente para echar los desechos de lenta degradación.
La observación viene al caso por que, al comenzar el feriado de fin de año, la Epam emitió un boletín de prensa señalando que debió actuar pronto para destupir alcantarillas taponadas a causa de que “la ciudadanía arroja desperdicios al alcantarillado sanitario, provocando su taponamiento y reboses”. Y, a renglón seguido, añade que otros taponamientos “se dan por la vetustez de las tuberías de asbesto cemento”.
Es obvio que los desechos sólidos únicamente pueden llegar al alcantarillado sanitario a través de los pozos de revisión destapados en las calles o mediante las descargas del inodoro dentro de cada casa o lugar de trabajo. Pero, en el primer caso, aunque sea gente del público la que se sustrae las tapas, es a la propia Epam que corresponde evitar que esto suceda o que, si sucede, las tapas sean repuestas de inmediato.
La Epam puntualiza que los últimos problemas de ese tipo, que debió resolver antes del feriado, ocurrieron en los barrios San José, Perpetuo Socorro y Jocay. Pero, curiosamente, al describir las soluciones puestas en práctica, se evidencia más bien que las causas eran deterioro de tuberías o instalaciones defectuosas.
Ramiro Almeida, responsable del área de alcantarillado, explicó que para atender de manera oportuna estos problemas se conformaron tres frentes de trabajo; y, debido a la complejidad de los daños, se requirió ayuda de equipo caminero.
En el Barrio Perpetuo Socorro (Calle M-2 y entre las avenidas 24 y 25) se intervino un tramo de 60 metros lineales, remplazando la tubería de cemento de 200 mm por una de PVC de igual diámetro. Mientras que en el Barrio Jocay se procedió al cambio de 50 metros de tubería, con la diferencia de que aquí se repuso la antigua con una de PVC de 315 mm.
En la Urbanización San José se trabajó a un costado de la estación CNT, donde los técnicos se encontraron con la novedad que dos codos estaban colocados de forma antitécnica, dificultando el normal flujo de las aguas servidas, que por eso rebosaban. Allí se reemplazó 2 metros de tubería de 110 mm.
Otra reparación antes de iniciarse el feriado es que se repuso el asfalto alrededor del redondel vial que se halla frente al Hotel Oro Verde, donde el domingo 27 de diciembre también hubo un problema en el sistema del alcantarillado.
FUENTE: Dirección de Comunicación Social de la Epam, mediante boletín informativo y fotos con firma de su director, periodista Pedro Clotario Cedeño. MANTA, 03 de enero de 2015.