La empresa municipal que gestiona el servicio de agua potable de Manta está maldecida o naufraga en un mar de desaciertos e impericias. Por enésima vez, en pocos días, ha debido interrumpir el abastecimiento a causa de un “desacople” de tuberías.
Felizmente esta vez “La ciudadanía mantense no se desabasteció de agua potable, por las reservas existentes”, admite la propia empresa en un comunicado público del que hemos tomado esta información.
Desde las 12 de la noche de este martes 20 de octubre, el equipo de técnicos y maquinaria de la Empresa Pública Aguas de Manta (Epam) se trasladó a un punto próximo al redondel distribuidor de tránsito en la vía Rocafuerte-Crucita-Manta, para reparar un nuevo desacople del acueducto de 800 mm de diámetro que conduce el agua desde la planta potabilizadora El Ceibal hasta Manta.
El desacople fue causado por maquinaria de un equipo caminero operado por trabajadores de una empresa contratada por el Gobierno provincial de Manabí (Prefectura), irónicamente como medida de prevención de riesgos en un tramo de la vía que conduce desde Rocafuerte a Manta.
La Epam consultó del daño a Víctor Espinoza, gerente de la empresa pública Manabí Construye (adscrita al Gobierno provincial), y su respuesta es que no entiende lo que quiso hacer el contratista de esta obra, puesto que su misión era prevenir un riesgo y en cambio ha ocasionado un perjuicio para Manta y sus alrededores, al desacoplar las tuberías del acueducto.
Siempre según la Epam, Espinoza dijo que remover el talud que daba protección a las tuberías ocasiona un movimiento continuo de masas, que va a seguir por algún tiempo hasta estabilizarse, por lo que recomendará al prefecto (jefe del Gobierno provincial) que esta labor se paralice y exija al contratista una explicación del daño, pues el trabajo debió hacerse cerca de la carretera y no de las tuberías. Además expresó que colaborará con lo que esté a su alcance para remediar el problema.
La Epam añade que, luego del incidente, el Gobierno provincial facilitó su maquinaria para en un trabajo conjunto reacoplar las tuberías y debajo de ellas colocar material pétreo, en vez del suelo deleznable y humedecido, creando una plataforma sólida donde hoy descansa esa parte del acueducto.
Sin embargo, hasta las primeras horas de la tarde del martes 20 de octubre, el personal especializado y la maquinaria desplazadas al lugar del daño continuaban allí, tratando de completar la reparación.
FUENTE: El comunicado público de la Epam y las fotografías adjuntas, tienen la firma de su director de comunicación social, periodista Pedro Clotario Cedeño. MANTA, 20 de octubre de 2015.