Presidente vitalicio de la Cámara de Comercio y de Autoridad Portuaria de Manta, fallecido el 2 de agosto a la edad de 104 años.
El día sábado 2 de agosto del 2014 ha fallecido en la ciudad de Manta don Carlos Pólit Ortiz, presidente vitalicio de la Autoridad Portuaria y de la Cámara de Comercio de esta urbe manabita. Al momento de su deceso, por causas naturales, tenía 104 años de edad.
“Ciudadano Ilustre” por el Municipio de Manta (1966 y 1977), presidió la Cámara de Comercio durante varios periodos bianuales desde 1952 y fue el fundador y primer presidente de la Autoridad Portuaria en 1966.
El periodista e historiador, Joselías Sánchez Ramos, recuerda que Carlos Pólit llegó a radicarse en Manta en mayo de 1944, representando a la firma comercial Dillon Co. Tenía 34 años. “Durante los próximos ocho años participa activamente en todas las iniciativas y actividades de la sociedad porteña, ganándose el respeto, cariño y admiración del sector comercial (por entonces el más importante de esta ciudad) que, en 1952, lo designa presidente de la Cámara de Comercio de Manta, funciones para las que será reelegido en varias ocasiones, reconociéndose su empuje, emprendimiento y decisión.” (Revista La Gente de Manabí, septiembre-octubre/2006.)
Desde la Cámara de Comercio de Manta consiguió rehabilitar la pista primigenia de lo que hoy es el Aeropuerto Eloy Alfaro, que en 1953 había sido destruida por la dureza del invierno. Promovió una colecta pública para eso, porque el Gobierno nacional carecía de recursos económicos. Un año más tarde construyó el edificio del gremio comercial. En 1987 promovió la constitución de una compañía destinada a desarrollar un proyecto de Parque Industrial.
También desde la Cámara de Comercio impulsó la construcción del puerto y la creación de la Autoridad Portuaria, por lo que se le confió presidir el primer directorio de esta entidad pública. Igualmente dio impulso a la creación del Colegio Manta y gestionó la donación del terreno donde se levanta el Instituto Técnico Luis Arboleda Martínez.
Este ameritado caballero nació en la ciudad de Chone, hijo de don Juan Pólit Cassard y doña Rosalía Ortiz Del Corral, propietarios de la legendaria Hacienda la Providencia, donde a principios del siglo XX se producía en abundancia el mejor cacao de aroma para exportación. La marca JP alcanzó resonancia mundial y quedó inscrita en una placa conmemorativa dispuesta por la Bolsa de Valores de Nueva York, EE.UU.
Estudió en el Colegio Pedro Carbo (hoy Eloy Alfaro) de Bahía de Caráquez y más tarde en el Colegio Cristóbal Colón de la ciudad de Guayaquil. En sus inicios trabajó como contador en las sucursales de los bancos Previsora y Central de Bahía de Caráquez, y después en la sucursal del Banco Central en la ciudad de Portoviejo. En las tres últimas décadas de su vida representó en Manta a la Fábrica de Cementos Rocafuerte (hoy Holcim).
“Su figura patriarcal –escribió Joselías Sánchez en el 2006- parece guiar
los sueños de los mantenses que diariamente se encuentran con él en las playas de El Murciélago o que lo saludan en el casco comercial de la urbe donde transita cotidianamente. ‘Hay que vivir un día más. Hay que caminar hacia nuestro destino’, dice con una sonrisa en los labios mientras evocamos sus 96 años que cumplió el pasado 2 de mayo del 2006.”
Ese caminar perseverante tonificó su cuerpo e inspiró sus ideas sociales. Aún en su edad provecta tenía energías para escalar sin pausas los tres pisos de la Cámara de Comercio, adonde otros de mediana edad suelen llegar jadeantes a pesar de detenerse en los descansos. Hasta los cien años concurrió infaltable a las asambleas públicas convocadas por el Municipio y la Autoridad Portuaria, dejando en cada caso la impronta de su palabra sabia y franca.
Este hombre, cuya vida sobrepasó la centuria, se caracterizó siempre por su interés entusiasta en los asuntos públicos, de los que comentaba con agudeza crítica pero respetuosa. Esta vocación lo llevó a expresarse periódicamente en artículos de prensa que publicaron medios de la provincia y el país, razón por la que era considerado un periodista que los gremios de esta profesión tuvieron en su seno. Y su voz admonitiva nunca faltó en los foros trascendentales donde se discutían los problemas y los anhelos de la población.
Con respeto y admiración para quien dedicó su vida a promover la prosperidad y el bienestar del pueblo que confió en él.
Revista LA GENTE de Manabí
MANTA, agosto 11 de 2014.
